Un buen finde
Sin piernas. Me he quedado sin piernas. Pero ha sido un buen finde.
Viernes, o el día tonto: Después de la locura de desayuno descrita en el post anterior y hacer todo lo uqe teníamos que hacer como niños buenos, nos fuimos a la playa. Aunque el viento destrozó nuestra actuación estelar con las cariocas, lo pasamos genial. Incluso Lola y Tanya se bañaron en las gélidas aguas. Yo decidí sacrificarme y no meterme para poder sacar las fotos....



Sábado, o el día del buen rollo: Al final de la tarde nos vamos a cenar de picnic a Christianshavn. Compartimos sandwiches y cerveza mientras el sol cae y la ciudad se vuelve azul. Después, concierto de reggae en Christiania. Bailamos con las cariocas, mucha gente se para con nosotras para practicar, enseñarnos o curiosear. Acaba el concierto y nos vamos a otro, que nos gusta menos, así uqe marcho con Jose y sus amigos a por la última cervecilla. Son encantadores, jugamos al futbolín, hablamos, reimos...





Domingo, o el día que mató a mis cansadas piernas: Por iniciativa de Lola y Jean, decidimos irnos a Louisiana (el museo de arte moderno) en bici. La idea no es mala: está junto al mar, el camino es bonito, hagámoslo en bici. El problema: está a 20 km!!! Me lleno de valor, monto en la bici que Jose me ha prestado la noche anterior, una bici entrañable pero pesada cual dinosaurio, y emprendemos la marcha. Hace un día precioso, lleno de luz y color, y el paisaje es todavía mejor. Finalmente, llegamos al museo, donde Andrew nos espera. Entramos. La arquitectura, jardines y ubicación son tan increibles como horribles son las obras de arte que expone. Lo recorremos entero, jugamos en el jardin, tomamos un bocata junto al mar. Lola dice que "too much is too much" y nos vamos a casa. En tren, por supuesto:)




